esencia

Dicen que el camino más largo es hacia el interior: dura toda la vida. Y que solamente podemos cambiar el mundo si cambiamos por dentro. En realidad, creemos que nos transformamos y lo que hacemos es encontrarnos con nuestra propia esencia. Porque la única tarea del ser humano es SER humano y el propósito de la vida consiste en VIVIR: te invito a ser TÚ, tu ser auténtico.

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martes, 21 de junio de 2011

Re-moviendo emociones e instintos

A propósito de la Spanish Revolution

El milagro ha vuelto a ocurrir: miles de personas tomaron las calles de varias ciudades españolas de manera pacífica el domingo 19 de junio. Tienen diversas ideologías y creencias pero les une su indignación. Las protestas se han extendido de nuevo a Europa. En estas semanas se están moviendo muchas cosas.

Instintos. Lo escribí en su momento y ahora lo reitero. Los cambios producen miedo y, ante éste, tenemos varias opciones. Podemos quedarnos atrincherados en casa, buscando mensajes que nos corroboren que las miles de personas que se han manifestado por una Democracia Real son extremistas que van por la vida armados y pegando palos... o podemos trabajarnos nuestro propio miedo, que es un instinto de supervivencia que nos protege de las amenazas, enfrentarlo y salir a la calle para comprobar lo que pasa y, si nos gusta, unirnos al movimiento.

Razón. A otros y otras es la mente la que les ha jugado una mala pasada y argumentan que no se unen a la Spanish Revolution porque no están de acuerdo con TODO lo que se pide. Toma, ni yo. La solución es participar, expresar tus desacuerdos y proponer alternativas. En este caso, me temo que nos traiciona nuestra falta de práctica en la participación ciudadana y la escasa responsabilidad social que existe (o existía) en España.

Emociones. También algunos y algunas nos hemos dejado arrastrar por las emociones. Por ejemplo, me comentan que durante alguna de las asambleas celebradas en Acampada Sol se propuso la supresión de las embajadas. Menos mal que alguien apuntó que, sin ellas, no sería posible la labor de muchas organizaciones no gubernamentales para el desarrollo en países que necesitan su presencia.

Existen, por último, depredadores, personas que intentan manipular a quienes tienen a su alrededor y utilizar el movimiento 15M a su favor y no para el bien común. Lo cual se evita si nos mantenemos en nuestro centro. Y desde ahí podemos quejarnos con razones tan sólidas como los 5 millones de parados/as, la burbuja inmobiliaria o la falta de vivienda y trabajo para los y las jóvenes.

Ni me gustan ni me parecen positivos los extremismos. No me considero de derechas ni de izquierdas porque creo que es momento de trascender las polaridades. No coincido con algunos discursos que me recuerdan que, si el capitalismo es nefasto para el ser humano, los sistemas comunistas -igual que los fascistas- también lo fueron. Tampoco me identifico con algunas de las consignas que he escuchado en manifestaciones como la del 19J, que no son pacíficas porque tampoco hay paz en quien las emite. Nos quejamos de los políticos y los banqueros, así en general, y se nos olvida que hay excepciones, y muchas. Me vienen a la mente Joan Melé, subdirector de Triodos Bank, que es un ejemplo de que la banca ética es posible, o los bancos solidarios de microcréditos. En lugar de insultar, me parece más apropiado exponer argumentos con sentido: apoyamos en su momento el rescate de los bancos porque iban a dar crédito a particulares y empresarios y ahora esos mismos bancos niegan el hipotecas y préstamos a individuos y empresas. Tengo a mi alrededor varios casos cercanos y seguro que no soy la única.

Sí me convencen las propuestas imaginativas, como esta original forma de pedir un referendum. Y me alegra que las reivindicaciones vayan dando sus frutos, como muestra el hecho de que el Congreso haya aprobado por unanimidad estudiar propuestas del 15-M, que algunos expertos consideran viables, según informa el diario Público. Un sueño hace unos meses, hecho ahora realidad.

viernes, 17 de junio de 2011

Busco...

...y construyo el mundo que deseo

"Life is not about finding yourself. Life is about creating yourself" @tonyelischer.

He pasado años buscandome y buscando. El que busca encuentra, estoy convencida.

Ahora bien, lo mismo ya es momento de crearme a mí misma -de crearnos a nosotr@s mism@s-, de tomar las riendas de nuestra vida y construir el mundo que queremos.

De manera pacífica, por supuesto, tal y como recuerdan, a propósito de la Spanish Revolution, José Luis Sampedro o Stéphane Hessel, autor de "¡Indignaos!".

Este movimiento ha de ser de todos y todas. Porque estamos en el mismo barco.

martes, 14 de junio de 2011

Una revolución internacional

El movimiento continúa

domingo, 12 de junio de 2011

¿Y cómo vamos?

El poder de los social media

Entre otras cosas, intuyo que la Spanish Revolution ha servido para demostrar que corren tiempos de cambio y, en concreto, para mostrarnos por dónde van las cosas en el ámbito social y mediático.

Soy usuaria de redes sociales desde hace relativamente poco tiempo y nunca he sido amiga de magnificar el poder de los llamados "social media". No concibo que publiquemos como cierta una noticia solo porque "alguien lo ha escrito en su twitter" y considero que el denominado "periodismo ciudadano" es más una fuente que otra cosa. También soy consciente de que en nuestros blogs, incluso cuando quienes escribimos somos periodistas, nos solemos limitar a expresar nuestra opinión, que no es lo mismo que informar.

Ahora bien, tras las revueltas en los países árabes y las acampadas en España no se puede ya dudar del poder de Internet, que como bien publica Periodismo Humano empieza a dar miedo a los poderosos. Habíamos otorgado credibilidad a los tradicionales medios de comunicación de masas y durante este movimiento, el conocido como "cuarto poder" se ha limitado, en la mayoría de los casos, a desinformar, ocultar información o mentir deliberadamente. Lo que no significa que yo no valore el trabajo de mis colegas de profesión, porque sé lo que supone ser una piecita de una gran maquinaria.

De hecho, hay excepciones, como este excelente reportaje de "Crónicas" en TVE en el que, bajo el título "Km. 0", se intenta explicar el movimiento desde dentro y que está a la altura de la poética visión del 15-M emitida en el canal France 2 de la televisión pública francesa.

Lo que sí siento es que estamos bastante despistados/as de por dónde van las cosas (prueba de ello es que nos planteemos cuestiones como si el movimiento ha de tener o no un líder o que no nos quepa en la cabeza que se puede vivir de otro modo) y lo achaco, en parte, a un cambio generacional. Siempre me ha sorprendido lo acomodados/as que estábamos, a pesar de ser "mileuristas", quienes ahora rondamos los 30 o 40 años de edad. Quienes sostienen las acampadas han nacido con las TIC bajo el brazo, consumen medios sociales y en cuatro semanas han generado propuestas más detalladas y elaboradas que los programas de los partidos políticos.  

Esta "generación NI-NI" (ni vivienda ni trabajo) tiene razones para quejarse. Cuando terminé la carrera, mi primer sueldo (CONcontrato) fue de 80.000 pesetas (unos 500 euros). Once años después, mi hermana pequeña, recién licenciada en el mismo sector, cobra 250 euros... SIN contrato. Lo explica muy bien Carlos Taibo en este video.

Hasta ahora, yo siempre había defendido que, para estar informado/a, lo suyo es contrastar varios medios, a ser posible de diferentes ideologías, de modo que uno/a pueda encajar las distintas piezas del puzzle y conformar una visión lo más cercana posible a la realidad. En esta ocasión los medios tradicionales no sólo no nos han bastado sino que, para informarse de lo que estaba pasando, hemos tenido que recurrir a los "social media" y las redes sociales. Creo que es el mejor ejemplo del nuevo mundo que se abre frente a nosotr@s.

sábado, 4 de junio de 2011

¿Hacia dónde vamos?


Un antes y un después de la Spanish Revolution

No sé en qué quedará la Spanish Revolution. No sé si se concretarán algunas de las propuestas realizadas. Ni si habrá al menos un acuerdo de mínimos. Sí sé que habrá un antes y un después de este movimiento, que es una señal de que vivimos tiempos de cambio. Y creo que marca el comienzo de una nueva era.

Siento que la “revolución” ha supuesto un revulsivo para muchas personas que estaban dormidas. Algo ha hecho “clic” en sus mentes y en sus corazones.Gracias, al menos, por intentar el cambio.

El movimiento ha calado en países como Turquía o Grecia, donde los logros de los y las indignad@s obtienen eco en la mayoría de medios (a excepción de los españoles). Islandia es un ejemplo a seguir.
 
Como Eduardo Galeano, considero que lo importante ahora es saber dónde estamos. Como explica este intelectual que no disocia la cabeza del cuerpo porque “hay que razonar y sentir”, dice, “la vida merece la pena”. Porque “otro mundo nos espera”.

Quién sabe. Puede que ya sea momento de echar a volar