Biocultura

La feria de productos ecológicos y consumo responsable, 

en IFEMA

Un año más se ha celebrado Biocultura en Madrid. En esta ocasión, la feria de productos ecológicos y consumo responsable se ha ubicado en IFEMA, con una amplia oferta de productos y actividades.

La directora de la Feria, Ángeles Parra, considera que el cambio de ubicación reafirma "la posición de BioCultura como el mejor referente del mercado español de productos ecológicos", lo que le permitirá "consolidarse en el exterior y promocionar la imagen de España como principal productor de agricultura ecológica".

En mi opinión, sin embargo, IFEMA me ha resultado incómoda: difícil acceso, en un lugar que no está cerca de casi nada (más que del aeropuerto) en Madrid; incómoda la situación de las salas, algunas muy alejadas entre sí y del pabellón; y agobiante éste, axfisiante en las zonas de comidas. A su favor he de decir que, después de muchos años, es la primera vez que he visitado la feria en domingo en lugar de en día laborable. Sea como sea, creo que el cambio de ubicación demuestra que lo "bio" ya no es exclusivo de minorías, aunque también le quita el encanto de lo "alternativo" que tenían las ediciones en el Palacio de Cristal de la Casa de Campo.

Más de 700 expositores y 17.000 referencias en cuatro jornadas en las que se han celebrado más de 200 actividades informativas independientes de la oferta comercial. Entre ellas, el festival ecológico de la infancia, MamaTerra, que ha acercado a los más pequeños a la agricultura ecológica y al respeto por el medio ambiente a través de diversas actividades. También este año prestigiosos cocineros han preparado platos con ingredientes ecológicos en el "show coocking".

Como dice Ángeles Parra en Noticias Positivas, "BioCultura es una apuesta por esas otras formas de producir, de consumir, de vivir, de alimentarse, de sanarse, de educarse… que no siguen las pautas convencionales, sino que están del lado de la balanza de la regeneración". Porque "para cambiar el mundo primero hay que aprender a cambiarse uno mismo" y "la única solución está en que tomemos las riendas de nuestras vidas". La presidenta de la asociación Vida Sana asegura que ya no se trata "de esoterismos raros o espiritualidades extrañas", como hace tiempo podíamos pensar: "nosotros sólo tenemos ya una ideología: la defensa de la vida, en sus múltiples facetas", explica.

Un ejemplo de esas "nuevas formas de vivir" es la creación de una plataforma para la cosmética ecológica. Un proyecto enmarcado dentro del programa Empleaverde que pretende impulsar el sector e informar a trabajadores y clientes de la cosmética convencional sobre los riesgos que comporta la utilización de sustancias altamente peligrosas para su salud. El objetivo principal es que aumente el consumo de cosméticos ecológicos y naturales por parte del sector de la belleza y se reduzcan los peligros de contaminación medioambiental que derivan de la utilización de la cosmética convencional. La red Ecoestética, creada como alternativa a la cosmética convencional sin componentes tóxicos, pretende impulsar la cosmética ecológica y natural en España.